MOCTEZUMA Y CORTÉS, DIFUSIÓN DE UNA IMAGEN
MOCTEZUMA Y CORTÉS, DIFUSIÓN DE UNA IMAGEN
Por Adrián González Cabrera
A mediados (aprox.) del año 2023, un sábado, como a las 09:00 pm, me encontraba en casa descansando después de haber buscado en la calle “algo” para llevar a casa para la cena. Llevé unos deliciosos esquites con mayonesa, limón y chile piquín, que incluían una pata de pollo. Al estarlos saboreando sentía que mis papilas gustativas inundaban de líquido la parte inferior de mi lengua.
Encendí la televisión a fin de disfrutar un partido de futbol que se celebraría en el Estadio Azteca de la Ciudad de México y sería transmitido por la televisora de San Ángel. Una vez encendida la televisión empecé a pisar el botón CH+ del control remoto para ir cambiando de canal ascendentemente hasta encontrar el que transmitiría el juego.
En el proceso de cambiar los canales, de repente sintonicé un canal de la televisora del Ajusco en el cual promocionaban un programa televisivo. Se trataba de la serie “Cortés”, y, en la presentación del mismo, pasaban una imagen introductoria en la cual, durante algunos segundos, aparecían de pie, frente a frente y mirándose a los ojos retadoramente, Moctezuma Xocoyotzin y Hernán Cortés.
¡La expectación que me causó el anuncio de dicho programa televisivo pronto se tornó en incomodidad! En la pantalla, a la izquierda, en el sitio más importante para efectos de imagen, aparecía Hernán Cortés, guapo, alto, blanco de piel y con un cuerpo normal, mientras a la derecha, en el lugar menos importante para efectos de imagen, aparecía Moctezuma Xocoyotzin, feo, bajo de estatura -al menos más bajo que Hernán Cortés-, oscuro de piel y mucho muy sobrado de peso, diríase: muy panzón.
Llamé por teléfono a mi hijo mayor para comentarle mi incomodidad al respecto y los motivos para tal, que fueron los siguientes:
En el libro “Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España”, cuyo autor es Bernal Díaz del Castillo (uno de los quinientos cincuenta soldados de la expedición), éste describe en el Capítulo LXXVIII:
Carátula del libro “Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España”.
“…para que viésemos qué tamaños e altos cuerpos tenían, trujeron un hueso o zancarrón de uno de ellos, y era muy grueso, el altor de un hombre de razonable estatura; y aquel zancarrón era desde la rodilla hasta la cadera: yo medí con él, y tenía tan gran altor como yo, puesto que soy de razonable cuerpo…” (Sic).
Respecto a este último párrafo habrá que considerar la historia del tlaxcalteca Tlahuicole “El Gigante”, que luchó contra el ejército de México-Tenochtitlán y, posteriormente -al ser atrapado en una de las guerras Floridas-, luchó integrado a las huestes Mexicas.
Bernal Díaz del Castillo. Nacido en Medina de Ocampo, España, hacia 1496(?)-1584.
Asimismo, en el Capítulo XCI, Bernal relata:
“Sería el gran Moctezuma de edad de hasta cuarenta años, y de buena estatura y bien proporcionado, e cenceño e pocas carnes, y la color no muy moreno…el rostro algo largo e alegre…Era muy pulido y limpio…” (Sic).
Gary Jennings, en su libro “Azteca”, refiere que la gente del entorno de Moctezuma era de un color de piel más claro que el resto de la población.
Moctezuma Xocoyotzin 1466-1520
Y respecto a Hernán Cortés, en el Capítulo CCIV, Bernal refiere:
“…de buena estatura y cuerpo y bien proporcionado y membrudo, y la color de la cara tiraba algo a cenicienta, e no muy alegre; y si tuviera el rostro más largo, mejor le pareciera…” (Sic).
Hernán Cortés. Medellín España, 1485-1547.
No es necesario un análisis profundo para adivinar que al “Cortés” del programa televisivo lo presentan favorecido, y, que, a Moctezuma lo presentan denostado y hasta ridiculizado.
Diversos historiadores refieren que los tlatoanis mexicas, antes de serlo, se habían formado en, entre otros, la dirección de los ejércitos, de forma tal que su cuerpo era esculpido por el intenso y prolongado ejercicio físico, además que su alimentación era sumamente cuidada.
En un breve análisis personal me pregunté: ¿Los guionistas televisivos ignoran la existencia de las referencias descritas por Bernal en su libro? ¿Los guionistas sí conocen la existencia de las referencias de Bernal, y aun así difunden una imagen denostativa y ridiculizante del Tlatoani?
Sea cual fuere la razón, considero que es importante aclarar lo correspondiente, citando la -en mi opinión- única fuente escrita por un soldado de Hernán Cortés que vivió los eventos en forma presencial: “Historia Verdadera de la Conquista de la Nueva España”.
Solicité a mi hijo mayor opinión al respecto. Me pidió unos minutos para emitirla.
Todavía no recibía yo opinión de mi hijo el mayor, cuando mi hijo el menor me telefoneó para recordarme que no se me olvidará ver el partido futbolero, ya que, al día siguiente, me contactaría para intercambiar comentarios conmigo.
De inmediato sintonicé el canal debido para disfrutar de lo que yo esperaba fuera un buen partido de futbol.
(Crédito de Imágenes a quien corresponda)
