NOSTALGIA DE OAXACA
NOSTALGIA DE
OAXACA
Por Ana María García Alvarado
AZCAPOTZALCOGRAFÍA.
Mi primer trabajo fue en la Lara (fábrica de galletas). Junto conmigo ingresaron varías chicas de la misma edad.
Una de ellas venía de un pueblo de Oaxaca, llamado Miltepec,
cercano a Huajapan de León.
Magdalena Velázquez, llegó al entonces Distrito Federal a trabajar.
Se estableció con su tío,
aquí en Azcapotzalco, en el Barrio de Santa María Malinalco.
Al igual que yo, ella supo del empleo por un familiar que ya trabajaba en esta fábrica.
Después de cierto
tiempo de trabajar en este lugar, en el
turno matutino se formó un grupo muy peculiar en la línea del segundo horno.
Éramos diez personas,
diez de cada lado, en
ocasiones eran dos personas
o más de acuerdo a las galletas programadas cada día y que debíamos empacar.
En ese horno salen galletas saladas, de canela, y las llamadas Marías.
Cuando, tocaba
empacar las galletas Marías,
habíamos más personas en la
línea, ya para el medio día, empezábamos a cantar y a hacer coro a las canciones de
moda de esa época, como por ejemplo de Juan
Gabriel, Antonio Aguilar, algunos boleros.
La que mejor nos salía era la Canción mixteca, se oía tan bonita aún en nuestras desafinadas voces.
Pero esta canción le
producía mucha nostalgia a
Magdalena, quien terminaba llorando al escuchar....
“Que lejos estoy del suelo donde he nacido
Inmensa nostalgia invade a mis pensamientos”
Al verla llorar, un silencio invadía la línea,
dando por terminado nuestro peculiar concierto.
Así, que en días posteriores cuando volvíamos a estar juntas, Emma (la compañera quien nos organizaba), pedía que se propusieran otras canciones, sin embargo la Canción mixteca nos salía tan bien…
Esa nostalgia de
Magdalena era compartida.
Muchas de nosotras no conocíamos Oaxaca
en este tiempo, sin embargo sabíamos
de la canción.
Nuestras añoranzas eran por otros motivos y la canción nos
las traía al presente .
Así, que, sin poder evitarlo, volvíamos a cantar la Canción mixteca, repitiendo las lágrimas de Magdalena, a lo que Emma empezó a molestarla diciéndole que “¿por qué tantas lagrimas?”
Le decía a Magdalena que se sabía que ella estaba trabajando
ahí para apoyar a su mamá y hermanas que se quedaron en el pueblo, y que después de tanto tiempo, ya debería superarlo.
Emma renunció al trabajo, y a nosotras nos separaron en las
diferentes áreas de producción.
Así se terminaron
esos momentos que nos hacían más leve el
trabajo, que nos permitió conocernos y apoyarnos hasta que por diversos motivos y después
de algunos años, fuimos renunciando a la fábrica de Galletas Lara, la
cual por cierto, poco después fue
adquirida por el grupo Bimbo.
De acuerdo con el compañero del “Taller de Relatos de Azcapotzalco”, Tarsicio, supe que el edificio en donde estaba ubicada la fábrica de galletas Lara, está en venta.
Los ciclos se cierran.....
“Inmensa nostalgia invade mi pensamiento....”
A lo largo de mi vida he conocido amistades de Oaxaca, de lugares como Etla, Coixtlahuaca, Miltepec, así que Oaxaca es parte ya de mis Nostalgias.