ROBERT FRANCIS PREVOST MARTÍNEZ
ROBERT FRANCIS PREVOST MARTÍNEZ
Por Raquel Rodríguez Sandoval
Un momento mundialmente histórico, de esos días que recordamos en qué lugar estuvimos al recibir la noticia, en mi caso fue en familia, todos expectantes y en la tercera oportunidad inesperadamente ¡Humo blanco!
Después la emocionante espera para conocer al elegido y por fin el anuncio.
Nuestro párroco en la homilía dominical nos advertía que en estos días en las redes sociales, la radio y televisión recibiríamos mucha información ya que todo mundo se convierte en experto, las apuestas y quinielas daban por ganador a algún cardenal, sin embargo nosotros oramos al Espíritu Santo para que inspirara a los votantes para elegir a quien a partir de hoy conducirá el rumbo de la Iglesia católica a la cual me enorgullezco de pertenecer.
En el grupo de Formación Musical continúa, la maestra Silvia Avilés nos compartió la siguiente información:
Perfil del recién elegido Papa León XIV
Nombre Papal: León XIV
Nombre Secular: Robert Francis Prevost Martínez, USA
Nacionalidad: Estadounidense y Peruana
Fecha de Nacimiento: 14 de septiembre de 1955 (69 años)
Lugar de Nacimiento: Chicago, Illinois, Estados Unidos
Experiencia y Cargos Previos
Arzobispo de Chiclayo, Perú (2015-2023): Sirvió
pastoralmente en Perú durante dos décadas, llegando a ser obispo y obteniendo
la ciudadanía peruana.
Superior General de la Orden de San Agustín (2001-2013):
Lideró su orden religiosa a nivel internacional.
Prefecto del Dicasterio para los Obispos (2023-2025): Ocupó
un cargo influyente en el Vaticano, responsable de la selección y gestión de
obispos a nivel global.
Presidente de la Pontificia Comisión para América Latina
(2023-2025): Demostró su compromiso con la región latinoamericana.
Cardenal Diácono de Santa Mónica (2023-2025): Fue elevado al
Colegio Cardenalicio por el Papa Francisco.
Rasgos y Estilo
Se le describe como un hombre de "dignificado punto
medio", sin excesos, pero con calidez y cercanía, dispuesto a bendecir a
los niños aunque quizás no a alzarlos en brazos.
Se le reconoce por su buen humor y alegría, incluso ante los
problemas.
Habla inglés, español, italiano, francés y portugués, y
puede leer latín y alemán, lo que facilitará su comunicación a nivel global.
Se le considera un hombre humilde y comprometido con los
grupos marginados, en línea con las prioridades del Papa Francisco.
Significado de su Nombre Papal
Al elegir el nombre de León, evoca una tradición de papas
que han demostrado fortaleza en tiempos de crisis. El último Papa León (León
XIII) lideró la Iglesia a finales del siglo XIX y principios del XX. El primer
Papa León (León Magno) es conocido por su liderazgo en el siglo V.
Hechos Históricos:
El Papa León XIV se convierte en el primer Papa de origen
estadounidense en la historia de la Iglesia Católica.
En resumen, el Papa León XIV es un líder con una amplia
experiencia pastoral y administrativa, un hombre de fe y compromiso social, que
asume el pontificado con la responsabilidad de guiar a la Iglesia Católica en
el siglo XXI. Su elección como el primer Papa estadounidense marca un hito
significativo en la historia de la Iglesia.
Otro dato relevante y del cual tal vez esperaremos un poco
más para saberlo, es la razón por la que eligió llamarse León XIV, pero en la
página Juvenil encontré este interesante dato.
AQUI UNA POSIBLE TEORIA O DIOSIDENCIA
Fray León fue un importante compañero y confidente de San
Francisco de Asís. Fue un sacerdote conocido por su pureza de alma y sencillez,
lo que hizo que Francisco lo eligiera frecuentemente como confidente y lo
llamara "ovejuela de Dios". Fray León fue confesor, secretario y
enfermero de Francisco, y lo acompañó en momentos cruciales de su vida, como la
estigmatización en el Monte Alvernia y en sus últimos días, cuando Francisco le
pidió que cantara el Cántico de las Criaturas.
PRIMER MENSAJE DEL SANTO PADRE LEÓN XIV DESDE LA LOGIA CENTRAL DE LA
BASÍLICA DE SAN PEDRO.
La paz sea con todos ustedes.
Queridos hermanos y hermanas, este es el primer saludo de
Cristo resucitado, el Buen Pastor que ha dado la vida por el rebaño de Dios.
También yo quisiera que este saludo de paz llegue hasta sus
corazones, que alcance a sus familias, a todas las personas, donde sea que se
encuentren, a todos los pueblos, a toda la tierra.
La paz esté con ustedes.
Esta es la paz de Cristo resucitado, una paz desarmada,
desarmante y también perseverante, que proviene de Dios, que nos ama a todos
incondicionalmente. Todavía conservamos en nuestros oídos esa voz débil, pero
siempre valiente, del Papa Francisco que bendecía a Roma.
El Papa que bendecía a Roma también daba al mundo entero esa
mañana del día de Pascua. Permítanme dar continuidad a esa misma bendición: que
Dios los quiere mucho, Dios ama a todos y el mal no prevalecerá. Estamos todos
en las manos de Dios.
Por lo tanto, sin miedo, unidos, mano a mano con Dios y
entre nosotros, andemos adelante. Seamos discípulos de Cristo. Cristo nos
precede. El mundo necesita de su luz; la humanidad necesita de Él como el
puente para ser alcanzada por el amor de Dios. Ayudémonos los unos a los otros
a construir puentes con el diálogo, el encuentro, uniéndonos todos para ser un
solo pueblo, siempre en paz.
Gracias al Papa Francisco.
Quisiera agradecer a todos los hermanos cardenales que me
han elegido para ser el sucesor de Pedro y caminar junto a ustedes como Iglesia
unida, buscando siempre la paz, la justicia, trabajando como hombres y mujeres
fieles a Jesucristo, sin miedo, para proclamar el Evangelio y ser misioneros.
Soy un hijo de San Agustín, agustino, que ha dicho: "Con
ustedes soy cristiano y para ustedes, obispo". En este sentido, podemos
todos caminar juntos hacia esa patria que Dios nos ha preparado.
A la Iglesia de Roma, un saludo especial.
Tenemos que buscar juntos cómo ser una Iglesia misionera, una Iglesia que construye puentes de diálogo, siempre dispuesta y abierta a recibir, como esta plaza, con los brazos abiertos a todos. A todos los que tienen necesidad de nuestra caridad, de nuestra presencia, de diálogo y amor.
Y si me permiten, también una palabra, un saludo, de modo
particular para todos aquellos de mi querida diócesis de Chiclayo, en el Perú,
donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado
tanto, tanto, para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo.
A todos ustedes, hermanos y hermanas, de Roma, de Italia y de todo el mundo. Queremos una Iglesia sinodal, que camine, que busque siempre la paz, que busque siempre la caridad, estar cerca de quienes sufren.
Hoy, en el día de la Virgen de Pompeya, nuestra Madre María
quiere caminar siempre con nosotros, estar cerca de nosotros, ayudarnos con su
intercesión y su amor.
Ahora quisiera rezar junto a ustedes por esta nueva misión, por toda la Iglesia, por la paz del mundo. Pidamos esta gracia especial de María, nuestra Madre.
Acontecido en Roma, 08 de
mayo 2025
Crédito de imágenes a quien corresponda