ADVIENTO
ADVIENTO
Por Tita Gómez
En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Hoy comenzamos un nuevo año Litúrgico, este es un tiempo de preparación que llamamos ADVIENTO, que significa que estamos a la espera de celebrar el Nacimiento del Niño Jesús.
¿Cómo nos vamos a preparar para recibirlo?
Muy sencillo, primero pensemos que hacemos cuando sabemos la fecha en que vamos a recibir la visita de algún personaje muy importante.
(Imagina que tendrás que hacer en tu Corazón para recibir al DIOS REY DEL UNIVERSO)
Querrás que tu corazón y tu alma estén lo más limpio, y que reduzca aun más la distancia.
(Confesión) hay que limpiar todos los rincones, que no quede
nada de polvo ni telarañas, ningún insecto que lo pueda molestar ni hacerle
daño. Y para eso tenemos que hacer una buena confesión y recibir el perdón de
todas nuestras faltas.
Una vez confesados tenemos que pulir los muebles con cera de la penitencia y ofrecer las oraciones a Nuestro Padre Celestial para que cualquier imperfección quede borrada.
¿Cómo vamos a preparar el pesebre para recostar al Divino Niño?
Paja muy limpia, con buenas obras, amor hacia nuestro semejantes, paciencia para con todos, dominando nuestro carácter para no ofender primero a Jesusito y a nadie más, no humillar a nadie, teniendo empatía con los que más necesitan de todo, amor, comprensión, alimento, ropa abrigados.
Hay tanta necesidad entre todos, que si compartes aunque sea un pan o cualquier cosa pequeña representará una brazada de paja limpísima para el pesebre del Niño Jesús.
Necesita pañales para que María lo envuelva.
¿Cómo los haremos?
Compra unos pocos dulces y galletas, no tienen que ser muy
caros y si puedes organiza pequeñas bolsitas con ellos, y cuando salgas y
encuentres a niños en situaciones precarias dales una bolsita a cada uno, así
habrás hecho unos lindos pañales para Jesusito.
Además recuerda que tus oraciones le van a dar cobijo para que no sienta frío, y si vas a Misa diario en este tiempo de Adviento y rezas el Rosario diariamente será como si le pusieras un calefactor Celestial.
Organicemos nuestro corazón para que sea el mejor lugar donde llegue Nuestro Señor, la Santísima Virgen y San José, intercederán por ti para nunca te falten las Bendiciones y Gracia para que tu vida siempre esté en la Benditas Manos de Dios Padre y la Protección del Espíritu Santo.