RECORRIDO HASTA NUESTRA CASA
RECORRIDO HASTA NUESTRA CASA
Por Martina Rodríguez
García
Venimos del cielo, venimos del mar.
Algunas veces
encontramos inverosímiles algunas historias, sobre todo cuando se relacionan la
tierra y el mar.
Hace mucho tiempo
la tierra se encontraba sujeta a grandes y bruscas transformaciones, la
temperatura sufría alternativos cambios y el vapor de agua condensado caía en
forma de tremendas lluvias sobre la candente corteza Terrestre.
En este tiempo
ARCAICO y que también se llama AZOICO, tuvo lugar la caída de un gran diluvio
que cubrió toda la superficie del globo.
Al finalizar los
tiempos ARCAICOS se forma el Océano Universal, con algunas islas.
Durante esta siguiente
época se manifestó la vida animal de una manera rudimentaria.
En un principio
tenemos los siguientes animales: crustáceos, moluscos, corales, peces, primeros anfibios y primeros reptiles.
Se formó el Estrecho de Bering en el Océano Pacífico. El Estrecho mencionado debe su nombre a su descubridor: Vidal Bering, en el año1728.
Al sur del Estrecho existe un collar de islas que se llaman Aleutianas que unen virtualmente los dos Continentes o por lo menos permiten el paso de uno al otro de pequeñas embarcaciones sin grandes riesgos, y es probable que los primeros hombres que poblaron América, hayan llegado por esta ruta.
Luego sucedió un movimiento migratorio que se encaminó hacia el sur, en busca de cálidas playas con abundante pesca, con ríos de agua dulce para beber y de lagos para obtener la sal, zonas de mejor clima, con diversas especies de plantas para alimentarse, entre otras cosas.
Es así como
llegan al territorio de nuestra República, grupos de hombres que forman tres
grandes corrientes migratorias que toman la dirección de la Altiplanicie para
llegar por fin al Valle de México. Estás tres grandes corrientes se conocen con
los nombres de tribus Nahoas, Olmecas y Otomíes.
Así pues en la
Meseta de Anáhuac se encontraron los grupos Nahoas y Olmecas que al correr del
tiempo se unieron, hasta quedar solamente el Nahoa que por el crecido número de
personas que la componían, logró imponer sus costumbres su idioma y nombre.
Corría el siglo XII,
cuando fueron llegando al Valle de México siete tribus llamadas Nahuatlacas en
virtud que hablaban el Nahuatl. Esas tribus se asentaron y fueron fundando
diferentes poblaciones, cómo: Xochimilco, Chalco, Azcapotzalco, Colhuacan, Cuauhnáuac,
Tlaxcala y Tenochtitlan.
Serpiente de
Espejo es el nombre de
uno de los guías de los mexicas cuando salieron de Aztlan y se aposentaron en
el lugar de Pedernal (la abundancia de agua, lugar donde existía mucho pedernal
y era pulido por la corriente del agua).
Dicen los
colhuas que nació Tecocomotli en Azcapotzalco.
Por este mismo
tiempo estaban en Izquitlán el chichimeca nombrado Ixahuatzin y Yaocotzin y
Xiyatl. En el lugar llamado Tezcacoatl, ahí se detuvo la guerra y se amojonó el
lindero de los Xaltocamecas en el dicho Texcacoac, Los Reyes, actualmente
Barrio los Reyes.
Recordemos que
durante el gobierno del Presidente Porfirio Díaz, las personas viajaban todavía en barco
por el rumbo de Santa Anita, y podemos ver un barco en el Mural que pintó Juan O
Gorman en la Biblioteca Fray Bartolomé de las Casas, en el centro de
Azcapotzalco.
Cómo olvidar los brazos del mar, los lagos, el Lago de Texcoco, y cómo olvidar cuando llegó Hernán Cortés aquí a Azcapotzalco. Aquí se encontraban algunos lugares con mucha agua, de varios metros de profundidad, otros con menos por ser la orilla del lago.
Hasta la verdura aquí la recibíamos de Xochimilco. En la llamada Alberca de Zancopinca era notable la profundidad del agua, lugar donde la leyenda nos habla de una mujer que vivió ahí.
Podría ser la sirena que raptó al Tlatoani de Azcapotzalco.
(Da clic aquí para conocer el relato)
(Imágenes: internet)